Foto Féminas: comunidad y representatividad
Creadora de una de las primeras plataformas dedicadas a las mujeres fotógrafas de América Latina, Verónica Sanchis es fotógrafa, curadora y periodista venezolana que ha vivido en Gran Bretaña, Hong Kong y actualmente reside en Nueva York.
Por Maíra Gamarra
Foto de apertura: Isabella Lanave. Fátima.
La plataforma Foto Féminas surgió en el 2015, desde la necesidad de presentar y promover los trabajos de fotógrafas latinoamericanas y del caribe, con la intención de fomentar la difusión de trabajos fotográficos hechos por mujeres, la visibilidad e inclusión de artistas emergentes, la ratificación de las artistas consagradas y la colaboración entre fotógrafas y organizaciones fotográficas.
El desconocimiento e invisibilización de la producción de las fotógrafas es todavía una problemática en el escenario fotográfico latinoamericano, pero el surgimiento de proyectos como Foto Féminas, que buscan crear acciones para disminuir las desigualdades estructurales y generar redes de contacto, apoyo y fortalecimiento entre mujeres, ha contribuido inmensamente para disminuir el desconocimiento y otras desigualdades enfrentadas en el campo fotográfico.
Foto Féminas es además un espacio que contribuye a la difusión, divulgación y reinterpretación de la imagen de la América Latina contemporánea, vista desde la experiencia y perspectiva femenina bajo la curaduría de Verónica Sanchis.
Verónica Sanchis
Foto Féminas surge de mis propias frustraciones como mujer venezolana y fotógrafa. Empecé mis estudios de fotografía en Gran Bretaña en el 2005, desde un principio en mis estudios noté que era difícil conseguir contenido realizado por mujeres fotógrafas, y aún más extinto por fotógrafas latinoamericanas. Esta curiosidad siempre me acompañó en mis estudios y eventualmente me lleva a escribir mi tesis sobre la diferencia de fotógrafos locales y extranjeros en México durante el siglo XX. Aquí investigo y comparo los trabajos de Manuel Álvarez Bravo, Edward Weston, Graciela Iturbide y Tina Modotti. Al descubrir el trabajo de Iturbide, quedo atrapada en su mundo documental de México. De aquí parte este apetito por seguir investigando sobre fotógrafas latinoamericanas. Posteriormente en el 2012, empiezo una columna mensual en la publicación virtual, Ventana Latina, llamada “Diez preguntas con…” Aquí tuve la oportunidad de entrevistar a diferentes fotógrafos iberoamericanos como: Karla Gachet, Marcelo Pérez del Carpio, Alejandro Cartagena, Antonio Briceño, entre otros. En esta experiencia de investigación vuelvo a notar la falta de presencia de fotógrafas latinoamericanas, al menos en el mundo cibernético era escaso. Esta experiencia a modo de entrevistadora, foto-editora, en conjunto con mi tesis e interés propio por el tema fotográfico y la representación de la mujer, me hacen llegar a la idea de Foto Féminas. En el 2014, decido crear una plataforma web con el objetivo de publicar un proyecto de una fotógrafa latinoamericana y el caribe de forma mensual. La primera publicación fue en enero 2015 con el trabajo de la fotógrafa argentina Lorena Marchetti, a quien anteriormente había entrevistado en Ventana Latina. Foto Féminas desde su primera publicación no ha parado hasta la fecha, pero nada de esto existiría sin el maravilloso trabajo que hace cada fotógrafa y el compromiso con el que trabajan.
Gabriela Rivera Lucero. Bestiario.
El compromiso sigue más latente que nunca. Somos una comunidad de más de 100 fotógrafas latinoamericanas y el Caribe. Todas con prácticas diferentes tales como; documental, periodística, conceptual y experimental. Lo que más me motiva a continuar con Foto Féminas es nuestra valiosa comunidad, de la cual en lo personal he aprendido muchísimo. Como comunidad, tenemos nuestros espacios cibernéticos y presenciales, donde compartimos oportunidades, contenido y también hacemos consultas relacionadas al gremio. Estos espacios además de seguros son valiosos para el desempeño de nuestras carreras profesionales, y por eso es importante nutrirlos y desarrollarlos. Asimismo, el archivo Foto Féminas es para mi una antología fotográfica que cuenta diferentes realidades contemporáneas de nuestra latitud latinoamericana. Es una colección muy valiosa, y accesible a todo el público en dos idiomas — inglés y español — con el objetivo de tener un amplio acceso con diferentes culturas. Con el tiempo, esta accesibilidad a dado resultados positivos para las fotógrafas publicadas. He recibido feedback — tanto de las fotógrafas como de otras organizaciones e individuos — que esta accesibilidad ha brindado la posibilidad de crear nuevas redes, conexiones y, por ende, oportunidades. Juntas en este espacio nos apoyamos con el trabajo de todas, y cada vez esa fuerza es más reconocida. Hoy somos más de 100 fotógrafas publicadas en la plataforma, y en un futuro cercano serán 200. Esto para mi tiene un valor gigantesco. Con la calidad de todos los trabajos y la constancia que tienen todas las fotógrafas continuaremos consiguiendo espacios para presentar los trabajo y seguir desarrollándolo como fotógrafas latinoamericanas.
Renata Bolivar. Vestiges: Highway nights.
En los últimos años han surgido otras plataformas y proyectos con objetivos similares al de Foto Féminas, ¿cómo percibes este crecimiento? ¿Crees que la invisibilidad estructural de las mujeres fotógrafas ha mejorado con las plataformas y proyectos que han aparecido en la última década?
Si, he notado la gran cantidad de plataformas y colectivos que han surgido para promover el trabajo de fotógrafas latinoamericanas. Me inspira mucho y también he tenido la oportunidad de poder estar en conversatorios con varias de las fundadoras de algunas plataformas. Me gustaría nombrar tales como: Colectivos Las Niñas, WOPHA, Fotógrafas del Norte, FEEM, Fotógrafas LATAM, Maulina, Femgrafía, entre otras. Mucho que aprender de estas compañeras que también crean mucho espacio para visualizar el trabajo de fotógrafas latinoamericanas. Asimismo, me gustaría mencionar plataformas fuera de nuestra región que también apoyan el trabajo de fotógrafas latinoamericanas tales como: Women Photograph, Black Women Photographers, Women Street Photographers, The Journal Collective entre otras.
Lo lindo de todas estas plataformas, curadurías y diferentes géneros fotográficos es que estamos colaborando, nos estamos conociendo, aprendiendo de cada voz, esta experiencia ha sido súper enriquecedora para mí, porque he tenido la posibilidad de poder seguir aprendiendo de mis compañeras en otros territorios.
Creo que si hay una mayor inclusión en la diversidad de fotógrafas, claro que todavía deberíamos ver más diversidad en medios y museos por ejemplo, pero creo que es también vital continuar desarrollando trabajos y espacios de diálogo en nuestra comunidad. Apoyarnos para que todos estos esfuerzos tampoco se desvanezcan en el tiempo.
Verónica Sanchis
Cuéntanos un poco acerca de tu trayectoria en la fotografía. ¿Cómo has empezado y cómo llegaste a lo que haces hoy día?
Empecé a estudiar fotografía cuando tenía 18 años. Tuve la oportunidad de caer en una escuela en donde nos dieron la oportunidad de poder experimentar con todas las vertientes de la fotografía; cuarto oscuro, estudio, documental, periodismo, moda, laboratorio de Photoshop, etc. Esta base fue lo mejor para mi porque desde un principio tuve un acceso amplio con la fotografía. Posteriormente me voy a la universidad a estudiar fotoperiodismo. Más allá de tener un módulo bien documental tenía espacio para experimentar con otros ámbitos como video, artes plásticas, escritura, etc. A mí la experimentación siempre me llamó la atención. Toda esta apertura me permitió conocerme y llegar al punto que más me motivaba: el territorio latinoamericano.
Como fotógrafa, trabajé en diferentes ambientes, estudios, asistente, editorial y comercial. Cada espacio ha sido súper gratificante, pero me encanta hacer encargos para medios, sobretodo, retratos.
Con respecto a todo lo que es editar y curaduría ha sido un camino muy orgánico. A mi siempre me ha encantado investigar y editar. Me encanta ver trabajos nuevos, historias, siempre hay algo nuevo que aprender.
Marisol Mendez. Dolorosa.
Vives fuera de Latinoamérica hace muchos años, pero tu trabajo todavía se centra en presentar a artistas de esta región. ¿Por qué esta decisión? ¿Cómo percibes la recepción de la producción latinoamericana en el exterior?
Tengo casi 20 años viviendo en el exterior, sin embargo, desde una temprana edad empecé con un gran interés por la fotografía y el cine iberoamericano. Esto siempre me llevó a investigar contenido. Luego de mis estudios universitarios decido enfocarme más en el trabajo de mujeres ya que esto correspondía a un interés personal como fotógrafa. La falta de trabajos contemporáneos por mujeres en diferentes espacios me motivó a tomar acción ante algo que me frustraba.
Yo siento que la inclusión ha aumentado, y todavía queda camino por recorrer, pero creo que muchos espacios y plataformas tienen un interés por colaborar más con la producción latinoamericana. Creo que lo importante es seguir desarrollándolo e invertir en estos diálogos para continuar creciendo como profesionales.